¿Es bueno estudiar con nuestros hijos o dejarles ser autónomos?

No es algo fácil de decidir, pero lo ideal es que a partir de Primaria los niños aprendan a formarse integralmente. Esto supone que además de ampliar sus conocimientos, lo ideal es irles enseñando desde el principio cómo se estudia, cómo deben organizarse, aprovechando el tiempo de estudio y no suprimir en exceso el lúdico. Una educación completa es la que les damos de forma integral y no sólo debe preocuparnos el que vaya aprobando asignaturas y pase de curso. Sí podemos ayudarles, pero sin hacerles las tareas, ni sentarnos con ellos. Son ellos lo que se enfrentan al examen, solos, y así deben aprenderlo desde pequeños.

Tendemos a ayudarles en exceso, incluso organizándoles el tiempo para estudiar. Eso siempre y cuando, no existan algunos problemas de aprendizaje y su desarrollo sea más lento. Entonces sí requerirán de nuestro apoyo durante algunos años. El primer curso de primaria es el momento idóneo para empezar en esta enseñanza de nuestros hijos y no esperar que lo aprendan de repente, solos y rápido.

El aprendizaje de los hábitos de estudio, es un proceso, que puede durar incluso un par de años. Con lo cual, si empezamos pronto, de cara al tercer curso, ya tendrá adquiridos más o menos esos hábitos de autonomía y podrán funcionar solos. Estudiar con ellos cada día, puede generar un retraso de maduración afectiva. Es bueno que aprendan a equivocarse y a pedir ayuda por sí solos. Dejar que hagan solos hasta donde ya no saben, sin requerir nuestra ayuda, les favorece escolarmente.

Algunas claves para favorecer este aprendizaje son: estudiar siempre en el mismo sitio (a poder ser, que sea su habitación bien iluminada y sin ruidos), hacerlo después de merendar y preferentemente en un horario fijo. Tener en cuenta que cuántas más actividades extraescolares tenga, menos tiempo dispondrá para sus deberes y , por supuesto, para jugar.Así que, siempre valorar si merece la pena tanta actividad extra. Y cómo hemos aludido antes, descartar previametne cualquier problema que les haga rendir menos.

Verónica Díaz

(Psicóloga educativa de AyC)